Análisis
de textos de autor 2
“¡A mí no me comas!”
Ficha bibliográfica
Título: ¡A mí no me comas!
Autor: Margarita del Mazo
Ilustrador: Vitali Konstantinov
Editorial: OQO Editora
Fecha 1º Edición: Junio 2011
Edad en la que me baso para realizar este análisis: 4-5 años
Resumen del cuento
El protagonista de este cuento es
Mateo, un niño que tiene miedo. Cada vez que se acuesta cree que un monstruo
rojo quiere comérselo: “¡Soy el monstruo terrible y rojo! ¡Lo que quiero lo
cojo! Tengo mucha hambre ¡y te voy a comer!
Para evitar que el monstruo rojo le
coma, Mateo le ofrece su osito de peluche, su perro, su hermano…, así va
sobreviviendo noche tras noche, hasta que la única persona que le queda por
ofrecer al monstruo rojo es su mamá y ahí Mateo consiguió sacar toda su
valentía y le plantó cara a sus miedos.
Tras la reacción de Mateo el monstruo
le devolvió a todos sus seres queridos, y se marchó para siempre, cambiando la
vida del pequeño.
La autora
La autora Margarita
del Mazo ha confesado que se inspiró en sus miedos infantiles, principalmente
el de la oscuridad.
En esta obra nos
muestra una historia cotidiana en la infancia, cuando los miedos se apoderan de
algunos pequeños.
Se define como
infantil, vitalista y bastante caótica. Su profesión ya desde pequeña se iba
definiendo, confiesa que se inventaba historias para todo.
Además de escritora
también lleva trabajando como narradora
de cuentos infantiles 20 años. Necesita la presencia y el contacto con
los niños en su vida.
Lo que más le llena
de esta profesión es ver la influencia que tienen sus cuentos en los niños y lo
que más la inspira son ellos mismos, lo que les ocurre a los pequeños.
¿Por qué este cuento?
He escogido este
cuento porque es un campo que no he profundizado aún, me refiero al miedo que
sufren los niños.
Éstos tienen miedo
de muchas cosas, algunas de ellas las reconocen y otras que no, incluso algunas
que desconocen.
Por eso considero
que es primordial leer libros infantiles de miedo para explorar y expresar sus
emociones y aprender a vencer sus miedos o al menos controlarlos ya que este
tipo de cuentos son una herramienta muy eficaz, el cual les enseña a
distanciarse del miedo permitiéndoles razonar y comprender, de manera crítica,
lo que está sucediendo.
Eso sí, en la
historia de estos libros el bien debe ganar al mal para que los niños ganen
confianza en la conquista de sus propios temores.
El Formato
El aspecto físico de
este cuento no es demasiado llamativo debido a que solamente cuenta con dos
colores el rojo y el negro, ambientándose de esta forma tan escalofriante al
miedo del protagonista.
El exterior influye
en la motivación, cualquier regalo entra por los ojos pero no es imprescindible
que la portada sea atractiva para seleccionar una obra.
La cubierta es dura,
dándole resistencia y protección al interior. Para la edad indicada este cuento
lo considero bastante manejable y cómodo para los niños, no es ni muy grande ni
muy pequeño, además no es pesado, lo que facilita su transporte.
El ilustrador
ucraniano recurre al lápiz de grafito y crayones de colores claros sobre el
fondo rojo (Como el color del monstruo) creando un álbum de auténtico miedo,
dibujando en la portada dientes y garras rodeando a Mateo.
En las páginas de su
interior sigue la misma tonalidad, el monstruo aparece en todas y cada una de
las páginas además de la hora en la que se encuentra la historia lo que hace
que los niños puedan seguir la historia también temporalmente. Cómo ya he dicho
en las páginas siempre aparece algún monstruo, considero que sólo deberían
aparecen en las escenas en las que el monstruo entra en acción, porque podría
confundir a los niños.
El cuento para
cuatro años puede liberarse de la imagen, sobre todo en el momento de la
narración. El niño no la necesita, como en etapas anteriores ya que su
presencia no podrá suplir la riqueza de su imaginación. La palabra del narrador
será el pincel que coloree sus propias imágenes. El libro de cuentos podrá ser
incorporado luego al rincón de la biblioteca, donde la ilustración cumplirá
otra finalidad: estimular al niño para que recree el cuento.
Las páginas son más
resistentes de lo normal, lo que beneficia el uso de los niños, evitando así
romperlo sobretodo pasando las página ya que los receptores se encuentran en el
momento evolutivo en el que tienen mayor habilidad en la motricidad fina de sus
dedos.
El vocabulario es
aceptable, fácil de entender a esta edad. El tipo de letra es adecuada para leérselo
a los niños, pero si lo que buscamos es que lo lean ellos, yo cambiaria las
minúsculas por mayúsculas, aunque a lo largo del cuento se puede ver como hay
algunas palabras ya escritas en mayúsculas, además la autora nos señala también
algunas de sus frases en negrita, para captar la atención del lector.
El contenido
·
El tema
El tema principal
del cuento es el miedo que siente Mateo.
El tema secundario
está relacionado con el principal, debido a ese miedo, Mateo es capaz de entregar
al monstruo todos sus seres queridos con tal de evitar que el monstruo le coma
a él.
Por último el tercer
tema también está relacionado con los anteriores, me refiero a la superación de
Mateo, al enfrentarse al monstruo y así recuperar a su familia y lo más
importante perder el miedo y ganar la valentía.
Todos los niños
tienen miedo, en el proceso de aprendizaje de la vida, el miedo es tan
necesario como el amor o el dolor, de ahí la importancia de este tipo de cuentos,
sobre todo en esta etapa dónde los niños empiezan a desarrollarlo, debido al desarrollo de la imaginación, que
influirá en los niños notoriamente en este aspecto.
Cómo en el caso de
nuestro protagonista, llegada la noche
era capaz de ver a un monstruo.
Otros niños
padecerán otro tipo de terrores cómo los fantasmas, ruidos… Todo esto
relacionado con la noche y con ello el miedo que sufren a la oscuridad.
El
miedo es un fenómeno evolutivo provocado por estímulos amenazantes, que se
viven como reales, produciéndose en los niños procesos emocionales y cognitivos.
La
educación hoy en día no responde tan solo a lo estrictamente académico sino que
también abarca las emociones de los alumnos. Adaptándose a los requisitos de
los alumnos así como motivándoles y guiándoles se contribuye al desarrollo de
niños maduros y seguros durante la andadura que realizan por el sistema
educativo.
El
ser humano atraviesa en su infancia por unos largos periodos de inquietudes,
temores o miedos que son muy necesarios para que en ese camino que va
recorriendo sea capaz de ir sentando las bases de un estado emocional fuerte y
seguro. Estos miedos e inquietudes formarán parte de toda la etapa infantil
incluso pasando a la etapa de educación primaria en ocasiones.
Tanto
el protagonista como los lectores a los que está destinado este cuento, aún son
inestables emocionalmente, empiezan a mostrarse independientes, pero es normal
que en ocasiones muestren ciertas inseguridades, como en este caso el miedo, que
suelen provocarles la necesidad de dormir acompañados de los padres o cualquier
miembro de su familia para sentirse protegidos, además en general suelen ser
egocéntricos, quieren que el mundo gire a su alrededor y necesitan sentirse
importantes para las personas de su alrededor.
De los 4 a los 6
años, el niño experimenta terrores personales que son normales, desarrolla el
concepto de identidad individual y su autoestima, tiene una vida imaginativa
rica y abundante, que le ayuda a entender lo real. Desarrolla su capacidad de
percepción selectiva y observación y tiene un concepto de moralidad absoluto.
En esta época es más autónomo en su lectura: ya distingue palabras y sabe
seguir la narración, “leyéndose” así mismo en voz alta, a través de las
ilustraciones. Le gustan los cuentos que le permiten trabajar sus emociones
personales, los cuentos que le hablan de la importancia del individuo, los
cuentos que le presentan la fantasía de manera verosímil, enriqueciendo su
mundo interior, los cuentos con secuencia narrativa clara, unidireccional, los cuentos
de trama predecible pero con finales sorprendentes, los cuentos que presentan
finales felices y justos, que le permiten desarrollar su capacidad para
percibir detalles, lo cual nos indica
que está preparado para trabajar este cuento.
A esta edad, los niños
gustan de los cuentos en los que se producen transformaciones (El paso de la
cobardía a la valentía que presenta Mateo), se interesan por los relatos con
escenas que entrañan peligro (El monstruo terrible y rojo asustando a Mateo),
pero que finalmente, llegan a un desenlace feliz (La superación del miedo junto
a la desaparición del monstruo).
Los niños serán
capaces de entender que se trata solamente de un cuento, que no es real y
además los niños que sufran este tipo de temores se sentirán identificados y
podrán comprobar que no tienen nada que temer, tomarán al protagonista como a
un referente para superar su temor personal, pero habrá que insistir en las
cosas que hace bien y mal el protagonista, para que los niños comprendan que
porque haya superado su miedo y vencido al monstruo no quiere decir que todo lo
que hace durante la historia sea correcto “El fin no justifica los medios”.
·
La estructura
El tipo de texto de
este cuento es una narración, acompañada por una estructura lineal, delimitando
el planteamiento, el nudo y el desenlace de la historia para facilitar la comprensión y el seguimiento de los lectores en este caso
los niños de 4 a 5 años, los cuales no tendrán ningún problema con esta clase
de estructura.
En el planteamiento
de la historia se ve cómo la autora presenta a los personajes y nos pone en
situación, explicándonos que Mateo, el protagonista se va a dirigir a la cama.
El nudo de la
historia comienza cuando el monstruo da sus primeras señales y Mateo asustado
empieza a ofrecerle sus seres queridos hasta llegar a la madre, que por ahí
Mateo ya no pasó.
El desenlace empieza
cuando Mateo se enfrenta al monstruo evitando que se coma a su madre y a él
mismo, el monstruo le devuelve a toda su familia tras su reacción y Mateo consigue
que el monstruo no vuelva a aparecer.
·
El protagonista
Mateo, es el
protagonista de esta historia.
Entiendo que Mateo
debe tener la misma edad que los lectores, aproximadamente, para que éstos
puedan sentirse identificados en su historia.
El comportamiento de
Mateo cambia mucho a lo largo de la historia. Al comienzo podemos ver a un
Mateo cariñoso, despidiéndose de su familia incluyendo a su perro antes de ir a
la cama, aunque despreciando a su hermano llamándole “El nuevo”, tierno al
abrazar a su peluche para dormir, asustadizo tras escuchar ruidos en su
habitación, poco valiente al no enfrentarse al monstruo, egoísta al ofrecer al
monstruo casi toda su familia con tal de evitar que le coma a él, chantajista
para que duerma acompañado y por último, valiente al conseguir reconocer su
miedo ante su madre, defender a su madre y a él mismo, vencer al monstruo y
hacer que desaparezca para siempre, superando su temor.
Habrá niños que
solamente les llame la atención la historia, pero habrá otros que se sentirán
identificados y éstos son los niños que sufren terrores, cómo he mencionado
antes, los niños que se sienten identificados verán al protagonista como un
referente ya que consigue vencer al monstruo y superar su miedo, los niños
deberán quedarse con el fin (La valentía, la confesión y la superación) y no
con el medio, para eso nosotros debemos guiar el cuento y recalcar lo que está
bien y lo que no.
·
Personajes
secundarios
La mamá: Mateo confiesa a su
madre su miedo, y ésta le tranquiliza
diciéndole que los monstruos no existen, durmieron juntos y Mateo no fue
capaz de vender a su madre al monstruo, su madre es quien hace que el
protagonista se enfrente al monstruo.
La tía Matilde: Dormía en la
habitación de al lado, Mateo fue en su busca para dormir juntos ofreciéndola
tranquilidad al día siguiente para leer, pero Matilde no se enteró de nada,
dormida llegó a la habitación. Mateo definió a su tía como dulce ya que siempre
está comiendo chocolatinas para que el monstruo se comiera a su tía y no a él.
El hermano Pablo
(“El nuevo”): Dormían en la misma habitación pero en
diferentes camas, Mateo chantajea a su hermano para que duerma con él
diciéndole que mañana jugará todo el día con él. Pablo accedió porque le
encantaba presumir de hermano mayor. Mateo definió a su hermano como rico para
que el monstruo se comiera a su hermano y no a él. Al denominarle “El nuevo” se
puede ver que no termina de aceptar que tenga un hermano, se podría deber a una
cuestión de celos.
El osito de peluche: Con el que dormía
todos los días el protagonista. Definido por Mateo como blandito, para que el
monstruo se comiera al peluche y no a él
Su perro, Cristofer: Definido por Mateo
como gordito, para que el monstruo se comiera al perro y no a él. Mateo le
chantajea diciéndole que mañana le daría el jamón de su bocadillo para
conseguir que duerma con él.
El monstruo: Habitaba en la
puerta de los abrigos de la habitación del protagonista, salía porque tenía
mucha hambre y lo que repetía una y otra vez era: ¡Soy el monstruo terrible y
rojo! ¡Lo que quiero lo cojo! Tengo mucha hambre ¡Y te voy a comer! Después de
comerse a todos los seres queridos del protagonista excepto a él mismo y a su
madre, eructaba: ¡UAAAA! Y con la tripa llena se iba por donde había venido
hasta la próxima. Hasta que Mateo se enfrentó a él, el monstruo se puso
amarillo, devolvió a toda su familia y se fue por donde había venido, llorando,
para no volver. El monstruo era el malo de la historia que acaba siendo el
vencido.
Se puede observar en
la historia como los personajes se conocen muy bien entre ellos, teniendo una
relación de cercanía, porque Mateo sabe exactamente que decirle a cada uno para
conseguir que durmieran con él.
·
Valores y
contravalores
VALORES
|
CONTRAVALORES
|
La normalización
del miedo.
|
Ofrecer al
monstruo toda su familia, vendiéndola.
|
Valentía por su
madre.
|
Poca valentía
respecto a los demás familiares.
|
Confesión del
miedo a su madre.
|
Egoísmo, al pensar
solamente en que el monstruo no le comiera a él ¿Y su familia?
|
Superación del
miedo al enfrentarse al monstruo.
|
El chantaje que
realiza a sus familiares para que duerman con él.
|
Desaparición del
monstruo tras la valentía de Mateo (Gana el bien).
|
Desprecio a su hermano
pequeño al denominarle “El nuevo”.
|
Los valores son un
pilar básico de la educación ya que dan sentido, orientan sus vidas y modelan
la personalidad de los niños, por ello los cuentos deben tener en cuenta esta
cuestión.
Tanto los valores
como los contravalores de este cuento son adecuados para la edad de los
receptores.
El propósito
principal de la literatura infantil es conectar a los protagonistas con los
lectores, haciéndoles reales, a través de la identificación de los niños con
los personajes.
Como ya he ido
contando a lo largo de esta entrada, los
receptores y el protagonista de este cuento están empezando a desarrollar el
miedo.
El miedo es muy
común en la infancia, con este cuento podrán darse cuenta de que sentir miedo
es un proceso muy normal que deben atravesar algunos niños, deben confesarlo
sin avergonzarse y lo más importante que les hará ver esta obra es que el miedo
que tanto preocupa a los pequeños puede superarse.
En cuanto a los
contravalores del cuento, los niños son conscientes de lo que hacen mal y de lo
que no, porque durante toda su vida les han estado guiando ante tal aspecto,
por eso podrán ver que algunos comportamientos de Mateo no son adecuados, los
cuales no deberán imitar ni tomarlos como referentes, para ello nosotros haremos hincapié para
asegurarnos de que los niños no confunden el bien del mal.
·
El lenguaje
El vocabulario que
utiliza la autora es cotidiano debido a su público infantil, empleando palabras
del día a día de los niños.
Utilizando frases
como: “Y eructó: UAAA” la cual haría mucha gracia a los niños.
El lenguaje es
narrativo, la autora cuenta la historia vivida por Mateo, utilizando guiones en
los momentos de diálogo y expresivo, ante el miedo y la sensación de
superación.
Se utilizan figuras
literarias como la rima: Era una noche sin luna. El reloj daba la una o ¡Soy el
monstruo terrible y rojo! ¡Lo que quiero lo cojo! Muy utilizadas en los textos
infantiles.
La repetición está
presente en todo el cuento, cuando aparece el monstruo, éste siempre dice la
misma frase: ¡Soy el monstruo terrible y rojo! ¡Lo que quiero lo cojo! Tengo
mucha hambre ¡Y te voy a comer! A lo que contesta siempre Mateo: ¡No…! ¡A mí no
me comas! Y a continuación ofrece a uno de sus seres queridos. Después la
autora siempre sigue este diálogo con: El monstruo terrible y rojo no se lo
pensó: abrió su enorme boca y se lo tragó entero. ¡Después eructó: UAAA! Y con
la tripa llena, se fue por donde había venido sin decir ni adiós.
La repetición ayuda
a los niños entender mejor el texto.
Las exclamaciones
están presentes en toda la historia, para que el narrador amplíe el tono que
había tenido hasta ahora, para dar el toque de terror que pide el texto.
Conclusión
Tras analizar y leer
este cuento con detenimiento, puedo concluir que sí, si utilizaría este cuento
en un aula de infantil porque como ya he ido explicando todos los niños tienen
algún miedo, y cuentos como éstos hacen que los niños puedan sentirse
identificados, ver que no sólo les pasa a ellos y sobretodo que no tienen de
que avergonzarse ante ello, y principalmente si las historias como ésta
terminan de tal forma en la que el niño ha sido capaz de superar su miedo y
enfrentarse a su temor, les hará ver que ellos también pueden, ese es uno de
los objetivos que tienen estos cuentos, vencer los miedos de los niños a través
de la ficción.
Este cuento
preferiría contarlo yo a que lo contaran
por su cuenta, ya que durante el cuento me gustaría recalcarles varias cosas,
sobretodo la actitud de Mateo que en ocasiones no es acertada, hacerles ver lo
bueno y lo malo de cada situación y la segunda razón por la que me gustaría
narrarlo es por la entonación del cuento, quizás ellos leyéndolo por su cuenta
no aprecian determinados momentos de miedo de la misma forma que si lo
escucharan.
A continuación de
narrar este cuento, los niños podrían dibujar al monstruo para familiarizarse
con él y no temerle.
He escogido la edad
de 4-5 años porque en esta etapa los niños están empezando a sentir el miedo, a
esa edad ya se pueden trabajar este tipo de cuentos por lo explicado
anteriormente, considero que este cuento se puede trabajar desde los 4 años
hasta los 7-8 años pero he decidió
elegir el ciclo de 4-5 años para trabajar desde el principio este problema (El
miedo) normalizándolo y con el tiempo ir apaciguándolo para que el miedo no
aumente en un futuro y sea más difícil vencerlo.
Bibliografía
·
http://blog.educo.org/por-que-tus-hijos-necesitan-leer-cuentos-de-terror/
·
Apuntes
literatura infantil
Perfecto.
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